sábado, 17 de diciembre de 2016

De nuevo aquí, por qué me siento tan vacía?

Nadie me dijo, o yo no supuse, o sabía, que ésto era cíclico, que vendría a mí como la moda vuelve; porque las tendencias vuelven (esos putos chokers que me negué a llevar en los 90 y me sigo negando a llevar hoy en día).

Ese señor de la bata blanca, que me hizo una infinidad de test, no me explicó lo que me pasaba. Es muy chuli ver en las series como los médicos le explican hasta el más mínimo detalle a sus pacientes, pero en la realidad, sales de la consulta con cara de Millán Salcedo pensando "lo cualo?".

Superé todo eso pero siempre se quedaron restos, no volví a ser la misma, tenía "cosas" del tipo, sentarme en el sitio más cercano a la salida, no rodearme de gente, pegar a la gente con el paraguas en el tren disimuladamente por invadir mi espacio personal, no sé, cosas.

Hace unos años explote de nuevo BOOMM!💣y conocí la bonita Fibromialgia, esa enfermedad tan incomprendida. Una amiga le explicó a otra la Fibromialgia diciendo que era que me ponía gorda. GRACIAS HAMIJA.

Con mucho esfuerzo, muchísimo, más del que nunca pude imaginar, salí renqueantemente victoriosa, con mis nuevas "cosas" adquiridas, como una imparable ganancia de kilos, un vestidor repleto de todas las tallas, desde la 36 a la 46, podría montar un Outlet en mi salón y sacarme unos euros.

Y cuando me creía a salvo...llegó de nuevo. Estaba agazapada la muy puta, y saltó con fuerza, como las leonas a sus presas en los documentales de la dos. Como el monstruo que vive debajo de tu cama.

Siempre ha estado ahí y estará. Maldita genética!


lunes, 18 de abril de 2016

Y esto.... ¿cómo se supera?

Dia 3 sin ti, casi ni he pegado ojo. ¿Cómo se acepta el alejarte del que creías que era el amor de tu vida?. Me siento morir por dentro.
Tranquila, de esto nadie se muere. La vida continúa y el mundo sigue girando
Las lágrimas vuelven a asomarse a mis ojos, quiero dormirme y despertar cuando ya no duela.... si fuese así de fácil....
Yo también lo estoy pasando muy mal me dijo.... revivo esas palabras una y otra vez; ¿porque no contacta si es asi?
Empieza la lucha interna.
Mas lágrimas, tengo que cambiar canciones en la radio, hasta encontrar alguna que mejore mi humor, que no me recuerde a ti.
Trabajo abundante hoy... perfecto!!! Esto mantendrá mi mente lo suficientemente ocupada para no seguir saboteándome y regocijándome en mi dolor.
Comienzo a pensar en que ocupar el tiempo de ocio, imprescindible estar ocupada para pensar lo menos posible.
Entrada en google... a ver.... como se supera una ruptura... no si la teoría esta ya me la sé toda....
Decido en ese momento que aún a riesgo de parecer patética, necesito sacar todo esto que siento a cada momento para soltar lastre, así que utilizaré el blog como terapia, puede estar bien, ¿por que no?
La teoría la saca cualquiera de un libro de autoayuda, ¿pero que es lo que realmente nos pasa?, ¿como lo vivimos?
Cuando empecé a dar le vueltas a la idea de esta separación, jamás contemple la idea de una segunda oportunidad. Si algo no funciona a la primera.... intentarlo de nuevo con el paso del tiempo... ¿no es ser un poco masoca?. Justo cuando empiezas a superarlo, volver atrás y deshacer el camino andado sin la certeza de que no volverá a salir mal, de que no volveras a sufrir.
Alguién sembró sin querer la semilla de una posible reconciliación, y me veo dándole vueltas a esa idea de como recuperarlo....¿de verdad quiero eso?
Supongo que para que nadie pudiese influir en mi decisión, no comenté nada hasta que ya estaba tomada o era un hecho.
Pero esa semilla me mata.... yo ni tan siquiera había contemplado la idea de que el me pidiese que no me fuera.... ¿y ahora me duele, que no lo haya hecho?, ¿que no me pregunte que tal va mi día?.
Pongo en orden las palabras en mi cabeza voy escribiéndolas, salen solas.
Y aquí estoy en una batalla interna entre lo que me dicen mi cabeza, mi corazón y mi dolor.

No tengo miedo a empezar de cero

Dicen que escribir es una buena terapia para curar y renovar tu alma, así que aquí estoy de nuevo.
Tal vez desde mi vocación de escritora frustrada, necesite sentir este dolor para escribir, porque es cuando me siento más creativa o tal vez; cuando la felicidad dentro de mi es total, no necesito expresar lo que tengo dentro y el brillo que desprendo no necesita de palabras.
Aquí estoy de nuevo, desnudando mi alma y con mi corazón hecho añicos... no recuerdo ya cuantas veces van ...
Otro fracaso, otra frustación, no tengo miedo a empezar desde cero....
No tengo miedo a la soledad, he sido muy feliz con ella.
No recordaba el dolor tan intenso, el ahogo en inseguridades, ese maldito nudo en el estómago que no para de crecer y que no me deja casi respirar... la pena, las lágrimas... no recuerdo que hubiese dolido tanto antes. Los momentos con la mirada y la mente pérdida, mis demonios regocijándose incansables. Duele mucho. Solo quiero que pare de doler.
No se exactamente ni en que momento todo comenzó a irse a la mierda, solo sé que un día tus ausencias comenzaron a hacerme daño y por mi bien decidí no continuar este viaje, bajarme de este tren que ya no es el mio.
Soportar abrazos vagos, besos fríos, la indeferencia en tu mirada, ha sido tan duro....pero alejarme de todo ello ha sido todavía más.
Lucho a cada momento, para recomponerme, no humillarme, no tratar de volver atrás.
Odiarte seguramente sería más fácil, pero no hay nada que pueda reprocharte.
No tengo miedo a empezar desde cero.
Vuelvo a ser mí única y auténtica prioridad, recomponerme, reconciliarme conmigo misma, volver a brillar.
Quiero volver a ser la mujer de la que una vez te enamoraste, no por ti; sino, porque de ella también estaba enmorada yo.
No tengo miedo a empezar desde cero, es solo que esta vez, no se me ocurre como hacerlo.


martes, 1 de septiembre de 2015

Recordando....

Hace cosa de año y medio, empezamos a notar en mi padre continuos despistes y olvidos. Lo que para mis hermanas y para mi, eran despistes achacables a la edad; para mi madre supuso una preocupación desde el primer momento. Mi padre un hombre con una memoria asombrosa y una mente privilegiada, cada vez tenia comportamientos más extraños.
Hay enfermedades que uno no querría que nunca le tocasen de cerca, pero cuando te tocan; mejor adaptarse y aceptarlo que llorarlo o rechazarlo.
Mi relación con mi padre siempre ha sido tremendamente tirante, él un hombre de los de antes y yo un rebelde con mucha causa.... el choque de trenes fué inevitable en tantas ocasiones.....
La primera vez que vi llorar a mi padre fué ya estando enfermo, se abrazó a mi preocupado por mi madre y yo lo console como pude. Desde ese momento, no se si consciente o inconscientemente, se han sucedido miles de momentos que nos han unido y nos siguen uniendo.
Mi padre es un hombre mayor, educado a la antigua; en aquellos tiempos donde los hombres tenían que ser serios, rectos y rudos, para no parecer blandos.
Ya sabéis los chicos no lloran que decía la canción; y mostrar demasiado los sentimientos, era cosa de mujeres.
Ahora no para de decir lo mucho que nos quiere a nosotras y sobre todo a mi madre; tal vez para que nos olvidemos, tal vez para seguir recordándolo.

domingo, 26 de abril de 2015

Te elegí a ti

Llegaste así sin avisar y me miraste como nunca nadie lo había hecho antes. Esa mirada hizo y hace que todavía me estremezca.
Solo tu sabes como calmarme en mis peores días; y conseguir sacarme una sonrisa, cuando siento que mi mundo está hecho pedazos.
Te elegí a tí, si te elegí, por tus te voy a querer igual esos días que ni yo misma me soporto.
Te elegí porque sacas la mejor parte de mi, porque has sabido llegar y mirar donde nadie había llegado antes.
Te elegí a ti, porque el lugar donde mejor me siento es entre tus brazos.
Me dijiste una vez que te encanta acabar los días abrazado a mí ... bien...  yo adoro despertar y que seas lo primero que vea.
Te elegí a ti porque en los días más horribles, cuando nada puede estar peor, llegar a casa y mirarte hace que todo dentro de mi esté en paz.
Te elegí a ti con todas tus perfectas imperfecciones porque eres bello, muy bello, por fuera y sobre todo por dentro.
Te elegí a ti, porque sacas los mejor de mí y haces que lo muestre.
Te elegi a tí porque me haces ser cada día mejor y ser más ambiciosa en la vida.
Te elegí a ti, porque haces más bonitos mis días.
Te elegí a ti, porque a tu lado he dejado de temer cualquier cosa que venga.
Te elegí a ti, porque eres tú... no podía ser nadie más.

domingo, 1 de marzo de 2015

Vamos a un lugar tranquilo a conversar y a tratar de ponernos de acuerdo


Siempre se repite la misma historia, siempre repitiendo los mismo patrones,
Las mujeres tenemos una gran tendencia a renunciar a nuestras vidas cuando nos enamoramos. Da igual lo mucho que nos hayan decepcionado antes, las mil promesas que nos hayamos hecho de no volver a sufrir... las mil reglas marcados frente a sentimientos y emociones...
No importan las horas y horas de charlas con amigas o frente al espejo... Un día decidimos arriesgarnos de nuevo y volver a dejarnos llevar; y sin darnos cuenta, estamos dando el pistoletazo de salida al principio de nuestro fin.
Todo nuestro mundo empieza a girar alrededor de esa persona, dejamos en un segundo plano nuestra vida, nuestros intereses... Comenzamos a adaptarnos a horarios y necesidades de otra persona y sin darnos cuenta; vamos renunciando a nosotras mismas.
Cuándo centras toda tu vida en otra persona, si esa persona no corresponde en igual medida (que es lo más probable), pronto llegarán las decepciones.
Aunque les culpemos, la verdad es que la culpa de nuestra decepción es exclusivamente nuestra, que hemos decidido renunciar a nosotras mismas por centrarnos en otra persona. Reconozcámoslo... es un gran error; y no podemos y mucho menos debemos obligar, a otras personas a hacerlo mismo.
En 1 minuto, se van desmoronando todos esos castillos que te habías montado en el aire, que habías construido en 2 días, se caen sueños, se desvanecen ilusiones... Ha llegado la primera decepción. Y no nos han decepcionado, nos hemos decepcionado a nosotras mismas, nos hemos vuelto a sabotear sin darnos ni cuenta.
Echas la vista atrás, recuerdas todos tus pasos, recompones tus ideales y te das cuenta de que se te ha "ido la olla demasiado". Te das cuenta de que si duele, es que algo no ha estado bien. Te castigas por haberte permitido la temeridad de haber renunciado a tu vida. Eres tú, no él. Es el momento de echar el freno, tomar aire, respirar hondo y preguntarte de a que punto has llegado, de a donde va todo esto; si es que va a alguna parte.
¿Que nos pasa?, ¿por qué repetimos siempre los mismo patrones?, ¿no nos ha quedado lo suficiente mente claro que esto no funciona así?.
Al siguiente minuto volvemos a sentir pánico, a desconfiar, nos martirizamos, "despotricamos", nos "encabronamos", nos ponemos en lo peor, lloramos, pataleamos...
PARA UN MOMENTO CHICA!!
ECHA EL FRENO!
Todo tiene solución, es algo tan simple como eso.
ECHA EL FRENO!!
Respira hondo, serénate, se te ha ido la olla pero ya está. Es el momento de solucionarlo.
Vamos a pararnos, reposar, recordar reglas, reestablecer ideales, recomponer normas. Vamos a centrarnos en lo que es bueno para nosotras mismas, en lo que no nos hace daño. Centra te exclusivamente en lo que te ha hecho feliz, en tu felicidad como persona, en los logros de los últimos tiempos, en tu autoestima. Vamos a tomar las riendas de nuestra vida de nuevo, centrarnos en nosotras mismas, recordar y no olvidar nunca que somos la persona más importante de nuestra vida. Vamos a querernos y mimarnos mucho, y a recordar cuan importante somos.
Recuperemos nuestros sueños e ilusiones propias, el punto al que habíamos llegado. Vamos a dejar de renunciar a nuestra vida que es nuestra y es una... aquí no hay segundas oportunidades; o vivimos ahora o mañana quizás sea demasiado tarde. Y vamos a vivirla lo mejor que podamos, sin arrepentirnos mañana de todo que aquello que podíamos haber hecho y no hicimos.
Está bien querer compartir nuestra vida con otra persona, claro que es genial.  Es muy bonito enamorarse y sentirse amada. Es genial tener sueños en común con la persona que quieres... pero si todo ello implica que estés renunciando a tu propia vida...  no tiene sentido, no es bueno.
Lo sé, es muy complicado; pero hay que lograr encontrar el equilibro.
Lo sé, no es fácil; en absoluto, nadie dijo que lo fuera... pero es totalmente necesario.
Lo sé, siempre se repite la misma historia; pero lo importante es que aprendamos a parar un minuto, respirar, serenarnos; y ver si el lugar en el que estamos, nos llevará al lugar en el que queremos estar mañana.
Aprendamos a no renunciar a nuestras vidas, solo a adaptar, equilibrar o hacer sitio a esa persona.
Lo importante no es, no cometer de nuevo los mismo errores; sino, saber darte cuenta en el momento y solucionarlo. Siempre se puede volver a empezar.
SE FELIZ, PERO TU, POR TI MISMA. Y recuerda que la persona que comparta tu vida, debe venir a SUMAR; no a sustituír. Si es así, entonces no merece la pena.