jueves, 13 de febrero de 2014

La sargento de hierro no tiene quien la quiera

La sargento de hierro no tiene quien la quiera, por eso su mirada es triste y su sonrisa apagada.
La sargento de hierro tiene el corazón gris, duro y la sangre negra; aunque trate de disfrazarlo con su altanería, hace mucho que esta muerta por dentro.
La sargento de hierro no soporta risas, alegría o color a su alrededor es por eso que trata de aplastar todo aquello que es bello. Se refugia en su estupenda casa y en bienes materiales, para esconder su soledad.
La sargento de hierro habla sin parar y habla sin decir nada; vano intento por compensar, las horas de silencio en su agujero.
La sargento de hierro es un ente toxico, que reduce tu energía, mina tu moral, enrarece el ambiente, atrae el mal rollo, necesita humillar a los demás para sentirse mejor y te agrede verbalmente sin razón.
La sargento de hierro es solo un pésimo marketing, una vendedora de humo; que te recuerda cada día quien es ella... ¿y quien es realmente?
La sargento de hierro en el fondo me da pena...su alma, su corazón y su vida están vacías... La sargento de hierro en el fondo sabe, que no es mas que un cabo corneta.... invisible, insignificante, insociable... alguien triste sin nadie que la quiera, sin amigos verdaderos, sin ilusiones, sin sueños.
Una infravida apoyada en un frágil castillo de naipes. Su trabajo es todo lo que tiene, por eso se aferra como una pantera... sin esto, ¿que le queda?, NADA.
La sargento de hierro ya no importa....bastante tiene ya ella con su vida.

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